lunes, 6 de agosto de 2007

Trucos para comenzar a vencer los atracones

1. Aprender a reconocer la sensación de hambre: Cuando sientes que se avecina el temido atracón, deténte unos segundos a reflexionar; respira profunda y lentamente como pasaré a detallarte:
El mecanismo de la respiración se compone de 2 tiempos: la inspiración (cuando tomas aire que normalmente debe ser por la nariz) y la espiración (cuando lo exhalas, en este caso lo harás también por la nariz y no por la boca).
Comienza a inspirar lentamente hasta que ya no quepa más aire en tus pulmones contando hasta 4 en forma rítmica, regular. Luego sostén el aire contando rítmicamente hasta 4 y por último exhala contando hasta 8, al mismo ritmo. Repite esto unas 10 veces como mínimo, preferiblemente acostado en tu cama o sentado. Comenzarás a sentir una sensación placentera de relajación que favorecerá el autodominio.
Finalizada esta serie de respiraciones rítmicas, concéntrate en tu estómago: comprueba si realmente te “pide” comida. Pregúntate si realmente tienes hambre. Te darás cuenta de ello si sientes sensaciones de vacío estomacal o, incluso, si tu estómago hace ruido al contraerse. El estómago se contrae a razón de 3 veces por minuto. Tienes que aprender a reconocer esas contracciones: normalmente se hacen evidentes desde una hora antes de las comidas principales. Recuerda que el ideal de alimentación implica un mínimo de 4 comidas diarias. Ten cuidado si estás fuera de horario, puede ser una trampa.

2. Rotulos de advertencia: Son ideales para complementar los ejercicios respiratorios y para llegar al reconocimiento del hambre.
Hay lugares clave para colocar los rótulos: la heladera, las alacenas, tu mesa de luz. En fin, tú sabes bien dónde colocar un ayuda-memoria. Posiblemente no desees que tu familia se entere de tu problema: yo entiendo éso. Coloca los rótulos entonces en algún rincón secreto al que sólo tú tengas acceso comprometiéndote a consultarlos con frecuencia, especialmente momentos previos al atracón.
Te sugiero las siguientes leyendas (pueden ser frases que te dices a ti mismo o hacer de cuenta que hay alguien advirtiéndote):

“RECUERDA CÓMO HAS DE SENTIRTE LUEGO DEL ATRACÓN”

“NO A LOS VÓMITOS, CUIDO MI CUERPO DE TODO DAÑO”

“SI ME DOY UN ATRACON, LUEGO ME SENTIRE ABSOLUTAMENTE DESPRECIABLE Y VOLVERE A CAER EN EL HORRIBLE CIRCULO VICIOSO DE ATIBORRARME DE COMIDA Y VOMITAR. DETENGO ESTO YA MISMO”

“ESTOY INFORMADO SOBRE ESTA ENFERMEDAD Y QUIERO RECUPERARME”

“MI CUERPO ES UNO SOLO Y TENDRE QUE CONVIVIR CON EL TODA MI VIDA. CUIDO MI CUERPO. LOS ATRACONES Y VOMITOS ATENTAN CONTRA MI SALUD”

3. Agenda diaria detallada: Prueba llevar una agenda secreta en la cual detalles día a día exclusivamente los episodios de atracones. Escribe minuciosamente todas las características de cada atracón como ser: hora, estado anímico previo (cómo fue tu día, tus frustraciones y tus logros), alimentos que consumiste, tiempo en que los consumiste, sensaciones posteriores, vómitos u otra conducta eliminatoria, el día “después”, etc. Realmente te asombrará y aprenderás mucho acerca de ti. Recuerda que es fundamental descubrir el factor desencadenante para poder corregir este mal hábito.

4. Confusión del olfato: Desde hace ya varios años se sabe del poder evocativo de la memoria que tiene el sentido del olfato. Ciertos aromas, por ejemplo, nos remontan a vivencias placenteras pasadas; otros perfumes nos producen una sensación de bienestar indescriptible. Aquí la técnica sería “embotar” tu olfato con algún aroma que logre sacarte de la mente la idea de un atracón.
A nivel neurofisiológico se ha comprobado que el sentido del olfato está conectado con un área del cerebro que se llama “sistema límbico”. Esta zona es la “sede” de las emociones. Es así como un determinado aroma al ser procesado por el sistema límbico desencadenará la síntesis de determinados neurotransmisores. Esto puede llegar a ser altamente beneficioso como alternativa complementaria de tratamiento para tu problema de bulimia. Cuando sientas que comienza el "descontrol" y que se avecina el atracón prueba aromatizar el ambiente con el propósito de bloquear todo pensamiento autodestructivo que quiera surgir en tu mente.
Los aromas recomendados, que vienen generalmente en la presentación de aceites esenciales son: Bergamota, Naranja, Mandarina, Jazmín, Geranio, Rosa, Nardo, Azahar.
Deberás descubrir cuál es el indicado para tu caso; a veces son necesarias las mezclas de varias esencias. Hay especialistas en el tema: es una forma alternativa de medicina que se denomina Aromaterapia. Hallarás al respecto mucha información en la red.
Básicamente te diré que los perfumes cítricos te serán de gran ayuda.
Los aceites aromáticos se diluyen en agua y se someten al calor. Se utilizan en pequeñas proporciones (4 ó 5 gotas en 100 a 200 cm3).

3 comentarios:

Anónimo dijo...

hambre? no tenemos hambre cuando nos atracamos, es hacer lo prohibido

DALILA dijo...

es q es tan complicado! de igual forma lo intetare, vomitar se me esta haciendo muy doloroso tanto fisica como mentalmente

ayuda! dalila_dragonfly@hotmail.com

Anónimo dijo...

es redificil..dejar de hacerlo , aunk soy conciente de k es malo i tngo un problema , creo k mas k todo es emocional no fisico ... pero para mi vomitar es tan facil...creo k ia tngo un grave problemaaa ....ayudnnnnnme!